11 diciembre 2006

El dominio de los sentidos

ANCHO PAISAJE QUE INVITA A VOLAR, A SALIR DE VIAJE Y ASÍ VIGILAR LA SOLEDAD DEL VALLE Y EL RÍO...



Así comienza el disco de SINGLE, con Pío Pío, haciéndonos entrar en un paisaje que hará florecer con garbo y soltura numerosas sensaciones y estados de ánimo.
La sensación de escucharlo cuando estás solo es como destapar una botella y entrar en ella. Como si fuéramos un pequeño Gulliver que encontramos una botella como las que tienen un barquito dentro, pero que en esta ocasión contienen a SINGLE. Entrar significa viajar por su cuello. Todo es estrecho, con cuidado, el sonido rebota con facilidad y no sabemos de dónde nos llega exactamente…Hasta que el ensanchamiento lo empiezas a notar con Señor Invierno, alegre y achispada, igual que un lambrusco rosado y gaseoso. Como si en medio de un inmenso páramo gris fueran a crecer los coloridos paisajes de laberintos de setos, caminos amarillos y prados inalcanzables para la vista.
En este deambular de colores fragantes llegamos hasta un momento para la reflexión y el relax:

Sé que algo raro te pasa
y tú callas
No te atreves a hablar
La voz se te quiebra

Te falta valor al mirar
Algo raro

Pero pronto despertamos con un tono chispeante: Llévame a dormir. ¿Alguien ha reparado en los ruiditos de fondo de esta canción? Es tan sutil como elegante, tan natural que parecen delfines, jejeje…Me pone de tan buen humor que casi me pongo a llorar.

Y, al margen de estas lágrimas positivas –acuño nueva expresión-, seguimos en el camino apostando fuerte, paseamos por un arroyo, en contra de su curso natural con Mira, basta en la cabeza. A pesar de su temática es una de las canciones más graciosas del disco, y las que tienen un ritmo que entra a la primera, pero también un peligro añadido: puede ser la primera de la que te canses.
Después de esta experiencia acuática volvemos a flotar. Qué rico mareo con Vete que insiste diciendo:

Vete, vete
que empiezo a estar harta de verte
Vete. Déjame vivir
Vete.
Voy a ser más feliz sin ti
Sin ti voy a ser más feliz

Hacemos escala en lo que yo llamo el “momento vainica doble” con su guitarra española y tintes más flamencoides. Teresa (la cantante) desgrana la letra de su Recuerdo Escolar con una naturalidad pasmosa.

Así, poco a poco, todo fluye hasta culminar y esperar el nuevo chispazo en la mecha. Llego a mi momento preferido del disco, la canción que me encanta escuchar a solas, cuando ando por la calle con el mp3 puesto y mirando a la gente que pasea ajena a la delicia que llevo a cuestas…jejeje…La ciudad es más bonita y los problemas no importan. Mi canción favorita dice palabras como:
Qué tonto es estar aquí, triste y solo sin ti
Perrito triste en soledad
Sólo queda ladrar
Yo quiero ir a tu lado en los aviones
y en el tren de alta velocidad
cogerte de la mano si te complace
Ya te echo tanto en falta si te levantas,
Porque madrugas para trabajar
Yo te echo tanto en falta
Tú lo sabes
Tu perrito librepensador

Lo que más sorprende de SINGLE es que puedes ubicar la canción visualmente en cualquier parte. Un disco diverso, hecho a base de muchos retazos y pinceladas. Definitivamente con tan buen hacer que resulta reconfortante que converjan los cinco sentidos en ese viaje que dura unos 55 minutos, pero que se pasa en un Pío, pío.

Deja de buscar. Algo bueno está pasando y te lo estás perdiendo. No tardes…